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miércoles, 21 de febrero de 2018

Luis Gomar Monio, jugador de nuestra academia, (Justtennis.by Jorge Aguirre Academy), consigue su primer punto y se estrena como ATP Players tras ganar sus cuatros partidos de Previa y vencer al francés Corentin Denolli, cabeza de serie nº4 y 390 del mundo en su primer partido de cuadro Final en el ITF Futures 15.000$ de Vale de Lobo, Portugal.



Luis Gomar Monio, jugador de nuestra academia, (Justtennis.by Jorge Aguirre Academy), consigue su primer punto y se estrena como ATP Players tras ganar sus cuatros partidos de Previa y vencer al francés Corentin Denolli, cabeza de serie nº4 y  390 del mundo en su primer partido de cuadro Final en el ITF Futures 15.000$ de Vale de Lobo, Portugal.

jueves, 18 de enero de 2018

El jugador de la academia, Diego Chavez representara en la Copa Davis a su país, Bolivia frente a Perú



Diego Chavez


Club de Tenis La Paz

Agradecimientos de Diego Chavez

Orgulloso de poder formar parte del equipo Copa Davis Bolivia. 
Un sueño que lo venía buscando desde hacía mucho tiempo, representar a mi país en un acontecimiento mundial. Que bonito es este deporte! Constancia, sacrificio y disciplina te ragalan estos momentos.
Los esperamos los días 3 y 4 de febrero en el club de tenis La Paz

La historia de Diego Chávez es similar a la de muchos jóvenes latinoamericanos que conocieron la emigración siendo niños. Unos se iban de sus países, otros veían partir a sus padres. Y otros tantos, como él, experimentaron las dos caras del proceso: despedir a quienes se iban y marcharse un tiempo después al destino elegido por los primeros. Así fue el comienzo del siglo XXI para miles de familias en América Latina, desde Ecuador y Colombia hasta Argentina y Bolivia, el país donde él nació.

Lo que diferencia a Diego de muchos otros chavales que llegaron al País Vasco en esos años es su talento deportivo y la constancia que ha tenido para entrenar hasta convertirse en un tenista profesional. A día de hoy, este joven boliviano es el campeón de Euskadi absoluto, ha ingresado en el ranking ATP y jugara la Copa Davis, formando parte del equipo de Bolivia. «Mi meta es mejorar cada día y ver hasta dónde puedo llegar», dice con una solvencia que camufla sus 21 años de edad.

Y es que, a pesar de su juventud, Diego es todo un ‘veterano’. El deporte lo cautivó desde la cuna. «Empecé a practicar tenis cuando tenía cuatro años, en Bolivia, pero iba a los partidos desde mucho antes. Mi padre era entrenador y mi madre iba a ver los partidos cuando estaba embarazada, así que desde entonces estoy ligado a este mundo», relata con simpatía. «Recuerdo que cuando mi padre iba a dar clases yo iba pegadito a él. Me encantaba acompañarlo. El tenis siempre ha sido algo imprescindible en mi vida», agrega.

En 2003, cuando él tenía ocho años, su madre emigró a Euskadi. La decisión, aunque muy dura, no era algo excepcional en ese tiempo. Por el contrario, era tendencia. La madre de Diego fue una de las 15.485 mujeres bolivianas que, según los datos del INE, cruzaron el Atlántico ese año. Buscaban expandir los horizontes, las perspectivas de sus familias. «Ella vino a trabajar y, por suerte, le fue muy bien. Yo me quedé en Bolivia con mi padre, mi abuela y mis hermanos, hasta que mi madre pudo traernos a todos». Para entonces, habían pasado tres años.

Diego llegó al País Vasco en 2006 y lo recuerda como «un cambio bastante brutal». Muchas cosas se alteraron. «Dejé a mis amigos de la infancia, la escuela de siempre, lo que conocía. Y me encontré con un idioma totalmente nuevo. En el colegio, las lecciones se daban en euskera, así que tuve que aprender a toda velocidad, con clases de refuerzo, para poder manejarme y entender lo que me decían». No le faltaron desafíos durante el primer año, que dedicó a su adaptación. «Estuve un año sin jugar al tenis, hasta que me fui acomodando. Entonces, sí, volví a entrenar»

Empezó en Barakaldo y poco después se pasó al Club de Tenis Fadura, donde sigue hoy. Pero también aquello le planteó nuevos retos. «Yo estaba acostumbrado a jugar en tierra batida y en altura», observa. Cochabamba, su ciudad, está a 2.500 metros sobre el nivel del mar. «Aquí tuve que aprender a jugar en pista dura y a comprender el sistema de entrenamiento, que también era distinto. Por suerte, me hice muy amigo de mi entrenador y poco a poco fui mejorando».

Diego es cauto y se plantea objetivos realistas, aunque no por ello poco ambiciosos. «De aquí a dos años me gustaría estar entre los 500 mejores del mundo. Sé que no es fácil, pero también creo que con dedicación y sacrificio se pueden hacer muchas cosas. Puedes tener aptitudes o talento, pero la disciplina y el esfuerzo es lo que marca la diferencia», opina el joven tenista, que tiene como referencia deportiva a Rafa Nadal. «Siempre me ha gustado por su carácter, por la capacidad para luchar cada punto y por la fortaleza mental. También me gusta Andy Murray; un atleta. Pero Nadal es impresionante».


Cuando le preguntan por su mejor partido, Diego responde sin dudar. «Fue hace dos años, cuando conseguí mi primer punto ATP. El partido duró cuatro horas, se definió en el tercer set. Iba 5 a 1, abajo, y conseguí remontar. Gané en el tie break y me metí en el ranking ATP. Fue increíble», recuerda. Momentos así ponen en valor el sacrificio de sus padres, que muchas veces lo acompañan y alientan en los partidos. «Cuando juego fuera de España, viajo solo y me apaño como puedo para controlar un poco los gastos. Cuando juego aquí, sí, mi familia y mis amigos están presentes. Ese apoyo suma mucho y se agradece».

Actualmente Diego reside en Fuengiróla y entrena en la academia Just Tennis by Jorge Aguirre, Marbella y ha sido elegido para representar a su país Bolivia en  La Ronda - Grupo II - Zona Americana de La Copa Davis, Bolivia VS Perú


Luis Diego junto a sus técnicos, Alejandro Davidovich, (campeón Junior en Wimbledon 2018) y compañeros de entreno de Just Tennis by Jorge Aguirre Academy, Marbella

sábado, 16 de diciembre de 2017

Manolo Orantes homenajeado por La RFET por su gran trayectoria en el mundo del tenis, Alejandro Davidovich y Nicola Khun, premiados por el gran año 2017 de ambos



El Presidente Miguel Díaz ha destacado la trayectoria del ganador de 33 títulos del circuito profesional, del Master de 1976 y Forest Hills de 197: "Sus éxitos han sido claves para que el tenis en España sea una referencia de éxito a nivel mundial. Y recordemos que Orantes ha defendido al equipo español de Copa Davis en 86 ocasiones, algo absolutamente único".

Manuel Orantes forma parte del selecto club del Hall of Fame de Newport, en Estados Unidos. Durante la cena de gala con motivo de los 106º Campeonatos de España MAPFRE, el presidente le impuso la insignia de oro de la RFET. Mañana domingo, antes de la final masculina de los Campeonatos de España Absolutos de tenis Mapfre, la RFET le realizará un segundo homenaje público.

El acto estuvo presidido por el trofeo original de Forest Hills logrado por Manuel Orantes en 1975, cedido por el CT de “La Salut” de Barcelona para este homenaje.

Manuel Orantes quiso agradecer el gesto en su tierra con un discurso muy emotivo. "En España y en Granada siempre me han tratado muy bien. Espero que los éxitos que tuvimos los jugadores de mi época se mantengan y sirvan como impulso a las nueva generaciones. Es un orgullo que la instituciones se acuerden de nosotros y que apoyen además a los jugadores del futuro".

Asimismo, los jugadores españoles Nicola Khun y Alejandro Davidovich, recibieron una placa de manos del presidente de la RFET como reconocimiento a su brillantes trayectoria en 2017. Davidovich se proclamó campeón de Wimblendon júnior (algo logrado por Manuel Orantes en 1967) y Nicola Khun logró esta temporada su primer título ATP Challenger en Braunsweig.


 RFET